Diferentes. Así pudiera resumir como fueron estas Navidades. Para algunos puertorriqueños las Navidades terminan luego de Los Reyes, para otros luego de las octavitas, para algunos cuantos y para mi es cuando terminan las Fiestas de la Calle San Sebastián. Estas últimas precisamente se celebran este weekend y que más quisiera yo que dar la vuelta por allí. Pero en lo que la nostalgia me ataca, voy a contar como lo pasé estando lejos de mi Isla.
Vivencias
Que las libritas que se ganan en esta época se vayan rápido, pero la alegría y el entusiasmo que nos acompañan perduren todo el año. ¡A enfrentar los nuevos desafíos con energía y creatividad!
Un abrazo,
Glory
Luego de más de una semana de lluvia y más lluvia (la misma que deseo caiga en Puerto Rico), al fin salió el brillante sol a calentar un poco el ambiente. La mejor forma para celebrarlo es tomar los pinceles y brochas y ponerme a hacer regueros. Empiezo con el canvas, pero luego seguiré pintando sobres, tags, papel de regalo, cartón reciclado… todo lo que aguante pintura.
Este adorable sato con mirada perdida ha sufrido mucho stress últimamente. Él es el miembro más joven de nuestra familia, pero eso no quiere decir que la mudanza no lo haya afectado. Sigue siendo un perro cariñoso, alegre, que cuando su amo llega hace mil ruidos para llamar su atención y que lo salude. Pero también anda muy celoso con su espacio y no tranza con los extraños. Se vuelve una fiera si siente que algún miembro de la familia está en peligro. Los cambios tienen la cualidad de poder dar a conocer de cuánto somos capaces.