Luego de más de una semana de lluvia y más lluvia (la misma que deseo caiga en Puerto Rico), al fin salió el brillante sol a calentar un poco el ambiente. La mejor forma para celebrarlo es tomar los pinceles y brochas y ponerme a hacer regueros. Empiezo con el canvas, pero luego seguiré pintando sobres, tags, papel de regalo, cartón reciclado… todo lo que aguante pintura.